MARIA RUBINKE
Hermosos niños blancos con la cara cortada y bañados en su propia sangre. El trabajo surrealista de la artista danesa Maria Rubinke tematiza la complejidad de la psique humana trabajando desde un lenguaje formal muy personal.
Hermosos niños blancos con la cara cortada y bañados en su propia sangre. El trabajo surrealista de la artista danesa Maria Rubinke tematiza la complejidad de la psique humana trabajando desde un lenguaje formal muy personal.